¡El envero ya ha llegado al Bierzo! Estamos sumidos en pleno periodo de cambio de color de las uvas, consecuencia del inicio de la etapa de maduración de las mismas. Esto quiero decir que comienza oficialmente la cuenta atrás para la ansiada vendimia. ¡Cada vez queda menos para la misma y en Godelia la esperamos con muchas ganas!
Como veis, en esta nueva entrega continuamos contándoos muy de cerca nuestros secretos más importantes. En esta ocasión, una vez mas, volvemos al campo, uno de nuestro lugares favoritos. Hace unos días os mostrábamos el estado de nuestras viñas, en general, y, en esa excursión, ya aludíamos brevemente al envero. Como ahora ya está con nosotros, en estos instantes se convierte en nuestro protagonista principal.
Como ya os adelantábamos, el envero marca el punto de partida de la maduración de las uvas y dura, aproximadamente, 15 días. Es a partir de este momento cuando estas sufren los cambios más importantes en cuanto a aromas, color y sabor, algo que se produce de manera irregular en los diferentes racimos. Sobre la evolución en el color que tanto nos llama la atención visualmente, en las uvas blancas el verde intenso se convierte en tonalidades de amarillos y la piel se vuelve más fina y traslúcida, mientras que las de la variedad mencía adquieren su tono azulado característico, nuestro color preferido. Lo consideramos así por lo peculiar que es y, sobre todo, porque nos encanta. No obstante, en realidad, disfrutamos de todos los colores, tonos y matices y no podríamos quedarnos con uno solo, ya que todos son maravillosos y disfrutamos en cada momento de la experiencia de contemplarlos y de los sentimientos que nos transmiten.
El envero en Godelia
En Godelia disfrutamos mucho del envero y es un hito importantísimo en la elaboración de nuestros vinos. Otra de esas experiencias únicas que en este caso es, además, casi mágica. Por eso hemos decidido daros más detalles y acercaros más a él. La semana pasada ya empezamos a ver cómo algunas bayas empezaban a colorearse y en los próximos días, paulatinamente, observaremos todos los racimos completamente coloreados. En nuestro caso, las primeras uvas en cambiar de color son las mencías de viñedo viejo, situadas en Valtuille de Abajo. Se trata de cepas con poca producción y uvas más concentradas que en agosto ya apuntan maneras para ser las primeras en entrar en la bodega.
Desde el pleno apogeo del envero, es decir, cuando el 100% de las uvas ya “han enverado”, se calcula, de forma muy orientativa, que la vendimia tendrá lugar en aproximadamente 40 días. No obstante, esto depende de muchos factores y, entre ellos, el tiempo aún tiene mucho que decir. Además, entre otras causas, también destacan la orientación, las operaciones en verde, y, sobre todo, el destino de las uvas, pues no es lo mismo cortarlas para hacer vino base para espumoso, que para un godello selección. Por tanto, este cálculo, como veíamos, sirve para hacernos una idea de las fechas probables de vendimia.
Por otro lado, a partir de ahora también tenemos que tener en cuenta que las uvas se vuelven más delicadas y vulnerables, por lo que, además de tener un ojo en las viñas, hay que tener el otro en el cielo y estar muy pendientes del tiempo. Y es que en estos momentos la uva ya comienza a contener azúcares y las probabilidades de sufrir enfermedades características de este periodo, como las provocadas por el hongo Botritis (Botrytis cinérea), también conocido como moho gris, aumentan. Así mismo, la polilla (Lobesia botrana) igualmente empezará a hacer de las suyas, por lo que en Godelia ya tenemos preparadas y colocadas nuestras trampas de vuelo para controlar la población.
Habréis comprobado que el envero es una etapa que nos encanta y en la que disfrutamos mucho. Esperamos que, a partir de ahora, si no lo hacías antes, vosotros también. ¡La vendimia ya casi está ahí!